MY DEAREST WOUND (THE BURIAL - 2023) - Análisis / Crítica / Reseña + Entrevista


“The Burial” de MY DEAREST WOUND es una obra poética y con un temperamento frío, pero una obra cargada de sentimiento, agonía y dolor. Pero ese sentimiento frío y calculador que refleja en sus canciones, es parte de su encanto. Sergio González (para el que no lo conozca) es un músico chileno, con cierto recorrido en la escena underground, autor de otras propuestas como RISE TO THE SKY con el que ha publicado hasta siete trabajos de estudio. Si conocen la plataforma Bandcamp, encontrarán allí parte de su música.

“The Burial” es el debut de MY DEAREST WOUND, un disco de Black Metal depresivo con toques atmosféricos que narra temas tan delicados como la muerte o el suicidio, el abuso o la depresión, pero siempre tratando todo con sumo cuidado desde la perspectiva interna del ser humano, que habla consigo mismo y plantea todo tipo de cuestiones.

La portada de este trabajo ha sido realizada por Natalia Drepina, que ha realizado un trabajo formidable. Además usando la tonalidad rosa o fucsia para el vestido acorde a la piel pálida, un diseño esencial para entender el fondo del disco y lo que acontece en su interior.

Desligándose de su proyecto madre como es RISE TO THE SKY, y habiendo lanzado trabajos tan fantásticos como “Two Years of Grief” 2023 o “Stay with Me When You're Gone” en 2022. Sergio nos intriga con otra obra estupefaciente que pone los sentimientos a flor de piel. Un camino narrativo y una música ajena al DeathDoom que nos tiene acostumbrados y con una estampa musical bastante depresiva. BlackMetal Depresivo comúnmente dicho, aunque se le podría definir de muchas otras formas, ya que su música alberga un camino amplio de senderos constantes y capas musicales de hermosa profundidad.

Si bien, este trabajo no sigue ese hilo narrativo del Duelo como pudimos ver en RISE TO THE SKY y “Two Years of Grief” pese a que tiene constantes vitales muy parecidas, pero no iguales. Es cierto que dibuja más oscuridad en el horizonte, pero también más agonía, desespero y frustración.

Ambos retratan la pérdida; pero desde perspectiva muy diferentes. En este trabajo se intenta añorar esa etapa de felicidad que ya no está presente. Además impulsa al pensamiento interior hacia el sufrimiento constante como un auto-abuso, y no busca la luz en la oscuridad. No le interesa, el daño ya está hecho. En ese aspecto este disco es más duro y más complejo. Pero algo me dice en mí que se podría haber enlazado perfectamente con “Two Years of Grief”. Sin embargo Sergio ha querido darle una vuelta de tuerca a su propuesta.

“The Burial” me ha gustado, pero veo que le falta algo más de carácter a nivel argumental, demasiado inconcluso a mi parecer. Quizás sea porque esa historia continúa y tendremos un nuevo capítulo en un futuro próximo. (Algo que me chocaba cuando escuché y analicé el disco, pero al realizar la entrevista que podéis ver a continuación, entendí muchas más cosas sobre este concepto y la idea que hay detrás.)

Echadle un vistazo a la entrevista que realizamos recientemente con mi amigo Manu de Guardianes del Metal. Podéis seguirlo en YOUTUBE y en TWITTER. (FACEBOOK - INSTAGRAM)

En lo musical, no he sentido el mismo feeling que con trabajos anteriores, los temas (algunos, no todos) los he notado muy pasivos con una voz muy gruesa como el primer corte When Did I Die? donde Sergio grita como poseso, pero no veo fortaleza, veo linealidad, me falta algo. Igual me ocurre con "End it all” que es más emocionante, su melodía central está muy bien, es pegadiza y te envuelve, pero vuelvo a decir lo de antes, es como querer ir a alguna parte y no saber dónde. No consigo entender la melodía, es de esas melodías que no son claras; te envuelven pero sin llegar a un punto de exaltación. “Annihilator” es quizás de las tres, la más redonda de todas, me encantan esos sintetizadores o teclados del inicio, los punteos y la susurrante melancolía que la envuelve. Además golpea con una fuerza sobrecogedora.

Es a mitad del disco, a partir de “A Thousand Goodbyes” y “We Don't Believe in Happiness” donde veo los mejores rasgos del álbum, igual ocurre con “Dreams” un tema calmado que en según qué momentos muestra su verdadera cara. “Life Was Pain” de 8 minutos, empieza de forma lenta con un piano muy lúcido y depresivo, entre melódico y agradable con una susurrante voz femenina que te adentra en sus miedos para golpearte con firmeza. Melodía pegadiza que se te clava en la cabeza y no te suelta. De las mejores del álbum.

“The Burial” es un disco más apático a mi modo de ver las cosas, demasiado cómodo. No es como esa guinda del pastel que escuchamos en “Dos años de dolor” que es un trabajo mágico y espectacular donde se nota la buena sintonía entre instrumentos, producción o nitidez. “The Burial”es más áspero y en lo musical cuesta más encontrarle el fondo.

Y lo recalco para que no se me malinterprete, no es un mal trabajo. Pero no tiene la misma grandeza que otros trabajos de Sergio. Yo personalmente, lo percibo distinto, le falta pulir muchas cosas y redondear otras para esquematizar mejor ciertos elementos de su música. En cuanto a sentimiento, tampoco me ha llegado como esperaba, no tanto como su obra anterior, pero la calidad está ahí y la música es música, cada uno la percibe de una manera.

Sergio está en un momento creativo muy bueno, no dudo de su talento ni de sus dotes compositivas. Y me sorprende su capacidad para desligarse de una historia, y de repente afrontar otra con tanta facilidad.

Este disco “The Burial” es el bálsamo perfecto en el que acurrucarnos cuando las lágrimas brotan de nuestras mejillas. Sé que hay mucha gente que conectará de inmediato. Esta música invita a ello, y si algo tiene bueno, es que en seguida te ves identificado.

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AUTOR: FRANCISCO ROMÁN (TWITTER)

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