EVNEN (LUNACY - 2024) - Análisis / Crítica / Reseña
Con tan sólo dos trabajos en su haber, los catalanes EVNEN han conseguido llenar de grandeza malévola la escena nacional. Su último disco “Lunacy” es un gran ejemplo de superación y de cómo se deben hacer las cosas. Aquí ya no se trata de triunfar o tener más que nadie, eso ya sabemos de sobra que es bien complejo a estas alturas, pero sí de base propones una propuesta sólida, bien construida y con un sonido demoledor, tienes más posibilidades de llegar lejos y sobre todo de calar en el oyente.
Y lo que respecta al metal extremo underground, desplegar en
tan solo 7 cortes algo tan gratificante como lo que se encuentra hoy día en
cualquier propuesta de la escena escandinava, no es tarea fácil. Lo llamativo
de todo, es que “Lunacy” propone algo que hemos visto en infinidad de
propuestas extranjeras y no es el típico disco que debería quedar en el olvido. Por
ello y por todo lo que transmite, me nace hablar del mismo, y como siempre hago
en mi blog, siento que un disco de tales características desde el corazón lo
digo, debería tener más apoyo del que está teniendo, sobre todo viendo la enorme calidad que hay detrás.
Lo que es seguro, es que estaré escuchándolo durante un largo período de tiempo, algo que a día de hoy la mayoría de nosotros no hacemos, más que nada por falta de tiempo. Son tantos y tantos los discos que salen todas las semanas, que es imposible abarcar todo lo que nos llega. Pero en el caso de los discos destacados, creo que es importante ponerlos en un altar y darles el cariño que se merecen.
EVNEN han conseguido arrastrarme el páramo más lúgubre a raíz de los voceríos
infernales de su vocalista, si a ello añadimos la consecución de ritmos
explosivos, guitarras estruendosas, riffs enrevesados, blast-beats y demás
parafernalia, tenemos la ecuación que hace posible una obra tan explosiva y emotiva, con un recorrido argumental muy cuidado.
“Lunacy” lo entiendo como una locura transitoria que va acortando tus sentidos a lo largo de 7 cortes que explayan sentimientos por doquier, rabia, ira, furia, dolor, pena, tristeza. En base a su umbrosa portada y su apartado lírico, entiendo que es como un reverso tenebroso, una búsqueda del ente dormido que a veces despierta y envenena nuestra alma con todo tipo de seducciones abismales.
En general, “Lunacy” me parece una obra absolutamente demencial, cuenta con un sonido brutal, una producción muy nítida y una limpieza instrumental que ha sido el detonante para disfrutar del tirón de un disco que no decae en ningún momento. En el transcurso de los 7 temas, no he sentido esa sensación de pereza, bostezo o flojera, todo lo contrario. Y es de esas veces que aplaudo que el disco contenga esta duración, siento que no necesita más.
Y aunque EVNEN cuenta exclusivamente con dos lanzamientos en su haber, no hay que olvidar que han tenido un gran ascenso desde que debutaran en 2015 con su primer acto en formato EP. En 2019 le seguiría el segundo acto y primer disco de estudio. Un single “Amygdala” compuesto por dos temas editado en 2021 vendría después, y acto y seguido el disco que nos ocupa actualmente en 2024, “Lunacy”. Su obra más meteórica hasta la fecha y un claro candidato a Top del año nacional.
Hay que reconocer que hay un gran salto tanto compositivo
como de producción en “Lunacy” con respecto al material previo. Un salto
muy significativo que hace que este disco sea ese gran paso adelante que necesitábamos. Lo cual
denota que la banda ha madurado, ha crecido, ha evolucionado, pero también ha corregido
los vacíos sonoros de su material previo. Me gusta que EVNEN siendo una
banda tan tapada tenga un sello tan definido. Su música de la que no he
hablado todavía, salvo pequeños matices, está enfocada en la etiqueta Blackened
DeathMetal, Black/Death o incluso Symphonic Death si atendemos al enfoque melódico de sus temas, porque sinfonías como tal el disco no tiene. Hay muchas variantes y
cualquiera de las etiquetas sería factible para definir una propuesta tan agresiva
y majestuosa como la que nos presentan. Pero creo que la opción de Blackened Death es la que mejor les queda.
Y no es el típico BlackMetal con el mismo mensaje manido que
trata los improperios de siempre, que no se mal entienda, no tengo nada en contra de ello, es una forma de hablar. Pero aquí hay un peso narrativo potente y el disco trata historias que ahondan en temas mucho más profundos que
nos atañen a todos como seres humanos. “Lunacy” es de esos discos que te
hacen mirarte al espejo, y pensar si todo está bien dentro de ti. Es un álbum
que rebosa personalidad por los cuatro costados y que además de atreverse con composiciones
veloces, es capaz de unificar agresividad y armonías, recreando una mezcla vigorosa
lo suficientemente hiriente para sacar a relucir tus miedos internos.
“Lunacy” se alimenta de todo tipo de dolores, y nos guía por un camino en el que la soledad, los problemas emocionales o la salud mental, están más presentes que nunca en nuestro día a día. Todo ello, idealizando un sueño y un vacío donde la quietud manda, el silencio es nuestro mayor aliado y la liberación del dolor, nunca llega. En realidad, nadie escucha nuestro grito interior. Siempre estamos cautivos en medio de ningún lugar donde las manos amigas no existen. “Lunacy” es como una pesadilla constante de la que no puedes salir.
ENRIQUECEDOR, FRENÉTICO Y CARGADO DE UNA POTENCIA ABOMINABLE. LO NUEVO DE LOS CATALANES EVNEN ES UNA OBRA DE UNA FACTURA IMPECABLE. “LUNACY” SE CONSOLIDA PARA MÍ, COMO UNO DE LOS ESTRENOS MÁS IMPONENTES E IMPRESIONANTES DE ESTE 2024.
“Lunacy” es mucho más que música enrabietada, rara vez se tiene en cuenta y me parece uno de los mayores errores que se comete cuando se analiza un disco de estas características. Pero vamos al meollo, y comentemos paso a paso, antes de entrar en otros temas. Empezamos con “Affliction” el primer peaje que hay que pagar para seguir ahondando en el destierro de la mente. Un tema que se toma su tiempo tras una leve intro de armonías sollozantes. La canción se inicia mediante una bofetada de redobles y una secuencia de ritmos penetrantes. Voces rabiosas con desgarros más brutos y un lienzo de contrastes bien definido de lo que se viene a continuación. Un tema que empieza muy fuerte, y que habla de cómo la penumbra es mejor compañera que la luz que nos alumbra.
La que es para mí, una de las pistas más estremecedoras del compacto “Lost”, tiene un nervio desbocado y un relinche frenético que te hipnotiza plasmando una onda expansiva repleta de filigranas técnicas de todo tipo. Aprecié escuchar este tema con los cascos puestos cuando redacté el análisis, tras muchas escuchas previas en el altavoz normal de mi PC. La diferencia sonora era palpable, incluso me imbuí de un espíritu delirante que en las primeras escuchas no supe apreciar. Un tema donde se palpa la crudeza y la oscuridad y que imbuye más aspereza al mensaje que antes os hacía llegar. La forma que tiene de sacudirte y de entretejer diferentes riffs hace que la composición incremente su tormento y su adicción a medida que avanza.
Pero el disco va a más, aquí ya se nota la madurez antes comentada, “Gray Matter” yo la escogería como la pieza central de la obra, una de las más ricas a nivel compositivo. Pieza enriquecedora que se desarrolla a partir de un rasgado solo de guitarra deprimente que se va bifurcando y amalgamando con otras armonías hasta estallar en un cúmulo de sensaciones difíciles de describir. Con este tema siento un gozo que no puedo describir, es emoción, pero es una emoción que me lleva a estar en diferentes lugares viviendo todo tipo de sin sabores. Un laberinto de emociones, compositivamente hablando es un corte efusivo, efervescente, va subiendo y bajando de intensidad constantemente. La voz en este tema parece una cuchilla que de desgarra el corazón por dentro.
Al contrario del corte anterior que tiraba más de emotividad; “Commatose” es como más gutural, enfrascado en un registro cuya ejecución es prácticamente perfecta. Es más directo y otorga una atmósfera sombría, un tema ultra veloz donde se pone de manifiesto el buen mano a mano que mantienen las guitarras de Jordy y Diego, junto con la batería de Yann. (Tremendo despliegue técnico). Y me gusta que se vean estas virtudes técnicas, y aquí lo digo, son excelentes músicos, pero no es lo único que debe sobresalir en un disco, yo quiero emoción, y aquí la tengo reflejada. Mi enhorabuena al conjunto, y a Jonathan por su labor vocal y por saber dar a cada pista lo que necesita en cada momento.
Una cosa es disfrutar de los tecnicismos y ver si están bien
plasmados, y otra es la escenificación de la obra, hacia donde va, que dice y
como transcurre. En “Lunacy” los elementos técnicos junto con la parte
narrativa, están bien sincronizados. Muchas veces cuando escucho un disco, si
veo que una de las dos partes falla, dejo una de lado para centrarme en la
otra; pero aquí hay chicha, hay meollo como yo digo, es el ejemplo de “Amygdala”
una de las piezas más variopintas y enigmáticas de la obra. Empieza fuerte,
pero va variando, se ralentiza y las melodías de guitarra van entrelazándose y
lo que empezó como un tema veloz, se vuelve un medio tiempo desgarrador repleto de variaciones. La parte central de la canción es soberbia, aparte hay un solo de guitarra que deja un momento para el recuerdo. El apartado final es un torbellino de furia, ferocidad e intensidad. Además cuenta con un groove muy marcado.
Para veloz e insano el penúltimo corte “Sanity”, tremendo metraje tiene y que manera de plasmar riffs con melodías de una brutalidad sísmica arrebatadora. Un ejemplo más de que las melodías tranquilas, no tienen por qué quedar de lado en un disco así. Y más cuando se añaden de forma suprema a la mezcla. Tras la debacle y potencia infernal, llega un intermedio gravitatorio que se va enroscando a tus oídos por medio de una voz cristalina y que se acomoda levemente hasta que de repente, los gritos abismales de Jonathan Plaza vuelven a resurgir marcando el tempo atronador de un tema que es otra cuchilla. Si quedaba alguna duda de que EVNEN han editado uno de los mejores trabajos de metal extremo del año, no hay duda que valga. Este tema demuestra que han venido para quedarse, y que tienen las suficientes tablas para estar en la cúspide.
Llegamos al final de la obra con “Lunacy” que arranca por medio de fugaces punteos lumínicos y envolventes melodías que dan pie a un remolino de emotividad que trae consigo un ímpetu prometedor. Y es que el tema no para de mejorar a lo largo de sus 6 minutos de duración. Un tema que, pese a su dureza, velocidad y vertiginosidad, resulta pegadizo y cuando lo escuchas una vez, quieres volverlo a escuchar otra vez hasta sacarle todo el jugo. Además, te asfixia, te posee, te estremece e incluye un estribillo simulando dos voces o lo que podría denominarse una especie de canto coral, nocturno y sepulcral rozando otras tesituras. Es un tema que incluye un riff afilado y penetrante que además de molar mucho; contiene un mensaje que si se analiza con detenimiento puede llegar a ser muy turbio, de hecho, esa parte del final de la composición con ese toque espectral le viene como anillo al dedo, ya que adopta un lado oscuro bastante inquietante que os pondrá los pelos de punta.
Obra maestra de EVNEN, un disco versátil, pero con una fuerza, una dureza y una potencia estremecedora. 7 cortes que pueden llegar a hacerse cortos, pero lo bueno es que puedes repetir y volver a empezar. Así hice yo la primera vez que escuché “Lunacy”, tres escuchas del tirón, no una ni dos, sino tres. Pocas veces escucho tantas veces un disco así de primeras. Eso sumado a las que han venido después de cara a la reseña. Y las que quedan todavía, porque el disco es redondo en toda su extensión y tiene un lugar muy especial en mi colección. Fue escucharlo el primer día, y caí rendido a sus pies.
Por mi parte, poco más que añadir. Si os gusta el buen Black/DeathMetal agresivo y brutal, no falléis a EVNEN, os vais a topar con un DISCAZO de los que hacen época.
COMPONENTES:
Daniel Aparicio (ex-Shattered Sigh) - Bajo
Yann Amarok (Atrexial, Shattered Sigh) - Batería
Diego Pérez - Guitarras
Jordy Rodriguez (Shattered Sigh) - Guitarras
Jonathan Plaza - Voces
TRACKLIST:
01. Affliction
02. Lost
03. Gray Matter
04. Commatose
05. Amygdala
06. Sanity
07. Lunacy
SELLO: INDEPENDIENTE
NOTA: 9/10
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AUTOR: FRANCISCO ROMÁN (TWITTER)
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